Oleatos de aceites y plantas

Hoy, día frío y ventoso, hemos pasado un buen rato en el taller de Equilibrio Natural.

Para comenzar, hemos preparado tres oleatos diferentes que estarán macerando el tiempo necesario para luego ser empleados en la elaboración de cremas y aceites de masaje y baño.

Oleato de caléndula: elaborado con aceite de almendras dulces y flores de caléndula. Se utiliza con frecuencia en los cuidados de la piel de bebé, debido a su suavidad. Es, por tanto, ideal para pieles delicadas y también sensibles, secas y con alguna afección o alteración. 

El aceite de caléndula tiene propiedades antiinflamatorias y calmantes.

Para el cuidado del bebé, podemos emplearlo como aceite para el baño, añadiendo unas gotitas al agua. Le aportará suavidad y bienestar. 

También podemos utilizarlo como aceite de masaje después del baño. Verter unas gotitas en la mano, frotarlas para calentarlas y masajear la piel del bebé suavemente. Este aceite no alterará su ph y no lleva incorporado ningún agente químico, por lo que no le perjudicará.

Y, como no, podemos emplearlo en nuestra piel de igual modo.

oleatos de aceites y hierbas

Oleato de árnica: elaborado con aceite de almendras dulces y flores de árnica. Poderosa planta, tiene cualidades antiinflamatorias que calman y reducen las zonas inflamadas. Además previene la formación de hematomas facilitando su reabsorción. Alivia contusiones, dolores musculares y articulares, y se emplea para traumatismos leves. Además, es antioxidante y cicatrizante.

Oleato de escaramujo: es decir, de rosal silvestre. Con este aceite podemos elaborar cremas y jabones, aunque de momento está en pruebas...  ¡en experimentación!

Y el rato en el taller ha continuado con la elaboración de jabones de miel y romero, en esta ocasión encargados como detalle de boda (publicaré el resultado) y jabones de ortiga, romero y tomillo. Estos últimos los he elaborado como pastilla de champú... los presentaré cuando estén curados.

Próximamente... crema facial de aceite de onagra, indicado para pieles maduras, apagadas y resecas.

¡Buenas noches!